El Gobierno de Javier Milei logró en abril un superávit primario de $845.949 millones (0,1% del PIB) y un superávit financiero de $572.341 millones, marcando un hito en su estrategia económica. La reducción del gasto público, después de meses de suba, refuerza la política de ajuste implementada desde 2024.
Luis Caputo, ministro de Economía, destacó que esto se logró pese a la baja de impuestos equivalente al 2% del PIB en 2024. Además, el crecimiento de los ingresos tributarios (+7% real interanual) compensó la caída de ingresos no tributarios (-24%).
El orden en las cuentas públicas permitió reducir impuestos explícitos y contribuir al proceso de desinflación
afirmó Caputo en redes sociales
Factores clave en la reducción del gasto
Las principales variaciones en el gasto público fueron:
- Jubilaciones y pensiones: Crecieron un 32% real interanual, mientras la Asignación Universal por Hijo (AUH) aumentó 53,7% en términos reales.
- Subsidios a la energía: Cayeron un 66%, mientras los programas sociales se redujeron un 35%.
- Impuestos: Se eliminó el Impuesto PAIS, se redujeron derechos de exportación y se derogó la suspensión de certificados de exclusión de IVA y Ganancias.
Proyección económica y el acuerdo con el FMI
El Gobierno busca cerrar 2025 con un resultado primario positivo de 1,6% del PIB, en línea con el compromiso con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Para ello, el crecimiento del nivel de actividad será clave en la reducción progresiva de impuestos.
Las provincias fueron las principales beneficiadas con transferencias de capital y corrientes aumentando 170% y 137% respectivamente. Sin embargo, la baja de subsidios a la energía representó el 43% de la suba en jubilaciones, evidenciando el reordenamiento de prioridades en el gasto público.